Un cambio de vida es posible. A partir de ahora, librarse del sobrepeso será una realidad con una cirugía bariátrica. Gracias a ella, son muchos los pacientes que se han olvidado para siempre de la obesidad mórbida y han mejorado notablemente su calidad de vida. El tratamiento es muy efectivo, además de tener una repercusión a nivel psicológico con el consecuente aumento de autoestima en las personas y ganas de retomar una vida más saludable.
Recomendaciones para los pacientes
Después de la intervención, es importante optar por la realización de actividades físicas, como remedio principal, para mantener la línea. Además, se puede llevar a cabo un plan dietético recomendado por un profesional, siempre y cuando la ingesta calórica no sea excesivamente elevada. Por supuesto, se deben evitar los refrescos porque contienen mucha cantidad de azúcares añadidos. En cualquier época del año, la mejor bebida es el agua fresca; ayuda a combatir el calor y mejora la hidratación. Por el contrario, las bebidas alcohólicas y el tabaco son los grandes problemas, ya que no aportan nada positivo a la vida del ser humano y crean adicción.
Hábitos del paciente después de la cirugía
En líneas generales, se ha observado que un gran porcentaje de pacientes mejoran su calidad de vida, en el caso de seguir a rajatabla las indicaciones facilitadas por los médicos. La puesta en práctica de subir en bicicleta, bailar en pareja o salir a caminar ya no será una utopía. Los dolores articulares también disminuirán y las probabilidades de sufrir enfermedades serán menores.
Con la cirugía bariátrica todo son ventajas. Los consejos previos te acompañarán en el desempeño como persona y la frustración quedará relegada a un segundo plano. Existe la posibilidad de consultar qué alimentos son más adecuados. Hay que olvidarse de las grasas. El deporte te proporcionará la energía necesaria para afrontar el día. Los preparadores físicos harán que estés en constante vitalidad.