La gastrectomía vertical, manga gástrica o sleeve gástrico es un tipo de cirugía de mínima invasión o laparoscópica con el objetivo de perder peso gracias a la reducción del estómago. Esto hace que la ingesta de alimentos sea menor por la temprana saciedad.
Aun así, la intervención no se realiza a cualquier tipo de paciente y para realizarla es necesario modificar algunos hábitos alimenticios llevados a cabo.
Ventajas de la manga gástrica
Someterse a esta operación trae muchas ventajas en el cumplimiento de los objetivos de pérdida de peso. Entre los beneficios están:
– Pérdida de peso garantizada: los pacientes pueden perder alrededor del 50 por ciento de su peso por medio de esta operación y, en algunos casos, puede llegar al 70 por ciento.
– Lapso corto: la pérdida de peso se logra de manera gradual entre los seis y doce meses tras la intervención.
– Sin secuelas: al ser una intervención laparoscópica, las cicatrices que deja esta en el abdomen son casi inexistentes. Además, la operación no dura más de dos horas y la estancia postoperatoria está entre dos y tres horas.
– No hay efecto rebote: el tamaño del estómago, una vez reducido, no vuelve a su estado anterior y apenas un 2 por ciento de los pacientes requieren una nueva operación. La educación alimentaria a raíz de este procedimiento es una de las claves.
El paciente de una gastrectomía
Ya se comentó que esta intervención no es para cualquier persona. Por ejemplo, no es aconsejable para:
– Pacientes con Índice de Masa Corporal superior a 35 con patologías como diabetes o artrosis.
– Personas obesas con un Índice de Masa Corporal superior a 40.
– Hombres y mujeres con alto riesgo por realizarse otras intervenciones quirúrgicas.
– Pacientes operados del abdomen.
En Obesis, la atención e intervención de calidad de una gastrectomía vertical en pacientes está totalmente garantizada. Ven a conocer cómo puede mejorar tu calidad de vida con nosotros.